Me ha tocado un vuelo de ida y vuelta gratis para dos personas, pero he renunciado a él. Es la primera vez que me toca algo y me revienta tener que decir que no lo quiero, pero aceptarlo sería totalmente irracional.
Quizás la próxima vez, leeré las bases del premio y miraré con más detenimiento las condiciones. Si lo hubiera hecho esta vez, me habría ahorrado las 1.474 fotos colgadas en 48 horas.
Inciso para los frikis interesados que dispongan de tiempo y de fotos: en la página web de Unilocus, cada día regalan vuelos con Ryanair a las cinco personas que tengan más fotos colgadas en su espacio web. Una servidora llegó a ganar com 1.474 fotos. Sí, lo sé, tengo mucho tiempo libre, es cierto. En cualquier caso, antes de mataros a colgar fotos, leeros bien las fechas en las que podéis volar y las destinaciones. Fín del inciso.
Pero en realidad, hoy no os quería hablar de viajes. No.
A veces tienes la suerte de que te toque un premio. Te haces ilusiones de futuro, pero al ver las condiciones en letra pequeña te das cuenta de que no es lo que buscabas. Y si encima el calendario tampoco coincide con el previsto, ya vamos mal. ¿Has perdido unos preciosos minutos de tu vida o los has ganado en darte cuenta de la situación a tiempo?
Ayer me di cuenta de muchas cosas.
Los que me ofrecían trabajo en París me dan largas. Parece que el inicio del proyecto va para largo. Ahora ya hablan de empezarlo a finales de noviembre y yo me cuestiono mi capacidad para aguantar un mes y medio más, como mínimo, sin hacer nada. Me siento decepcionada y como un borreguito que acepta todo retraso en el proyecto sin importarle su futuro.
Es duro decidir: ¿esperar 4 meses y tener trabajo asegurado para cierto tiempo y con un buen sueldo o moverme por mi lado, después de haber visto que las condiciones no eran las esperadas? Ayer, después de muchas charlas, lo tuve claro y creo que Infojobs es una buena solución para empezar.