Füssen es un pueblecito turístico alemán que, como su nombre indica, está al «pie» (o pies, mejor dicho…) de los Alpes. Está a escasos kilómetros de la frontera con Austria y muy cerca del norte de Italia, por lo que abundan los turistas italianos y, también, las pizzerías (de agradecer, tras llevar ya 4 días comiendo carne). Casi todos los turistas que llegan a Füssen están de paso visitando el famoso castillo de Neuschwanstein, pero es totalmente recomendable pasar un par o tres días disfrutando de la naturaleza y los paisajes alpinos. Nosotros estuvimos 3 días enteros y, sinceramente, no nos hubiera disgustado quedarnos otro día más porque en los alrededores de Füssen hay miles de cosas por hacer.
Castillo de Neuschwanstein y senderismo
Después de la visita guiada, puedes tomarte tu tiempo para disfrutar de los alrededores: acércate al puente colgado (Marienbrücke), o a la cascada, o incluso si quieres puedes seguir las rutas marcadas por la montaña, más allá del puente. No obstante, ten en cuenta que la foto que vas a tomar del castillo siempre será desde detrás, por lo que si quieres conseguir capturar la típica foto de las postales, deberás bajar e ir a buscar el teleférico de Tegelberg (dos montañas más allá).
Si estás alojado en Füssen, puedes ir andando hasta Schwangau (30-40 min) o en bici. Los carriles bici están súper bien conservados y siempre están apartados de la carretera.
Vuelta en bici al lago Forggensee (30km)
Visita relámpago a Austria
Garmisch-Parternkirschen
Si estás más días por la zona, es bueno saber que puedes pasar otro día en Garmisch-Partenkirschen, la famosa estación de ski donde tienen lugar los saltos de esquí y donde también se encuentra el monte más alto de Alemania (Zugspitze). Probablemente desde arriba haya una vista preciosa a los Alpes!
La Ruta Romántica
Füssen es la última «estación» de la ruta romántica, una carretera que recorre varios pueblos de Baviera llenos de encanto. Hay quienes hacen la ruta en coche, pero bici tiene que ser una pasada!
Dónde comer en Füssen
En el Römerkeller comerás bien y por poco dinero. Platos típicos de la región. Para beber, pídete la cereveza König Ludwig en honor al rey bávaro 🙂
Dónde dormir
Estuvimos alojados en el hostal L.A House. Limpio, barato y cómodo. Estuvimos muy bien. Su único problema es que para desayunar siempre hay lo mismo: huevo duro, café/te, zumo y panecillos con mermeladas o mantequilla. No están acostumbrados a tener huéspedes durante más de 2 noches… jeje.