Además de las Ferias de Turismo, de las que ya os he hablado en mi último post, hay otras manera de promocionarte como blogger de viajes profesional -siempre y cuando quieras precisamente eso, darte a conocer! La opción de tener un blog personal y seguir escribiendo sin ánimo de lucro es también una muy buena opción 🙂
En cualquier caso, si tienes en mente utilizar tu blog para dar a conocer productos y servicios turísticos, te animo a que te profesionalices y empieces a actuar pro-activamente. Aquí te dejo algunos consejos para que te dés a conocer:
1. Acude a los Travel Blogger Meetings
Sin duda, una de las mejores maneras de darse a conocer es hacer networking con otros bloggers de viajes. En estos meetings, organizados por Victoria y Eddy, nos juntamos varios bloggers de viajes y compartimos una jornada hablando de nuestros proyectos, de próximos viajes o de iniciativas turísticas que nos han llegado. Se realizan 2 ó 3 veces al año en distintas ciudades de España y son una ocasión genial para «desvirtualizar» a los compañeros. En su página oficial encontrarás más info de cómo apuntarte a los próximos travel blogger meetings.
Además, habitualmente a los TBM vienen empresas turísticas y destinos que desean promocionarse. Un buen momento para conocer sus planes de promoción on-line y de intercambiar tarjetas con los responsables de márketing o relaciones públicas de esas entidades para el futuro.
Eddy y Victoria hacen una labor espléndida para dar a conocer el mundo blogger y para conseguir que el sector turístico nos tenga en consideración. Por eso, en los meetings se habla de tú a tú, se debate sobre iniciativas turísticas del momento y se hace mucho networking para colaborar entre todos.
Algo importante es que al formar parte de la red de Travel Bloggers Meeting entras en el «mercado de bloggers de viajes» y consigues así que otras entidades «te vean», un requisito esencial para proponerte para blogtrips o estrategias puntuales.
El último TBM se realizó en Madrid durante Fitur 2012. No se sabe cuándo será el siguiente, habrá que estar atentos… ¿Quizás en Barcelona para el SITC?
2. Publica tu portfolio o press-kit para las empresas que visitan tu blog
Cada vez hay más empresas y entidades abiertas a colaborar con bloggers. Si llegan a tu blog, muéstrales públicamente quién eres, qué tipo de blog tienes y cómopuedes ayudarles a promocionarse. Para ello, lo más sencillo es que tengas una sección bien visible donde publiques tus datos de contacto y la información relativa a tu blog.
En la quedada #iblognoruega organizada por Turismo de Noruega en el marco de Fitur 2012, Paco Nadal y otros bloggers con mucha experiencia, coincidieron en que «era el momento de profesionalizarse como blogger», y para ello «hay que dejar de vender humo». Si queremos que las empresas turísticas confíen en nosotros y destinen más presupuesto a las estrategias con bloggers, tenemos que ponérselo un poco más fácil. Como en todas las acciones que emprenden, necesitan saber qué ROI pueden obtener: a qué público va a llegar ese blogger, qué impacto puede llegar a tener, cuánta gente lo va a leer, qué posicionamiento tendrá en los buscadores, etc.
Todas estas informaciones deberían estar bien anotadas en tu press-kit o apartado de presentación para que las empresas puedan conocerte y proponerte colaboraciones afines a sus públicos objetivos. Al final, cuánto más transparentes seamos mejor para todos. Somos muchos bloggers y hay que diferenciarse. Si nos diferenciamos, las empresas verán con qué bloggers les interesa más (por target, geografía, tipo de posts…) y las acciones no se repartirán (como ahora está pasando) entre los mismos de siempre.
3. Contáctalos tú, sé pro-activo. ¡No muerden!
Las empresas turísticas no muerden 🙂 Es cierto que suele costar más llegar a un buen acuerdo si les contactas tú que si te contactan ellos, pero si tienes las ideas claras y sabes por dónde atacar, tus pequeñas acciones pueden ser un éxito asegurado.
No se trata de escribir un mail a todas las empresas que te vengan a la cabeza sino de pensar realmente a cuáles quieres conseguir. Intenta tener claro a qué empresas puedes ayudar y por qué, qué les puedes proporcionar con tu blog…, y escríbelo en una propuesta. Házsela llegar de forma personalizada y adaptada a cada una de ellas, para que vean que realmente tienes ganas de trabajar con ellos y que tienes las ideas de negocio claras (al final, esto es lo que les va a interesar porque deberán justificar su acción con bloggers a cambio de tráfico web, ventas, impacto, etc).
Una muy buena opción es contactar con alojamientos, restaurantes u oficinas turísticas durante la planificación de tu próximo viaje. Es una forma ideal de enriquecer tu viaje (irás a restaurante y hoteles a los que quizás por presupuesto no irías) y de tener una propuesta sobre la mesa para enviar. Puedes contactar con varias empresas y organizar tu «viaje de placer con toques de business experiencial» 😉 Debo admitir que lo he hecho con algunas empresas de las que había oído hablar muy bien y me apetecía probar; para mí es una forma de tener contenidos para el blog y para ellos es una acción promocional fácil y cómoda.
Desgraciadamente todavía hay muchas empresas que no saben que una acción con bloggers puede ser muy rentable (bajo coste y buena promoción), así que ánimo si no te responden o si la respuesta es negativa.
4. ¿Aceptas publicidad y posts patrocinados? Díselo
De nuevo, pónselo fácil y explica en tu página de contacto o de presentación que pueden contactarte para colaboraciones, publicidad, etc. Así, les será más fácil contactarte -desde las empresas en las que he trabajo he visto que a veces, si uno no tiene contacto con bloggers, «da miedo» escribir a un blogger para sugerirle una colaboración. Me considero una privilegiada por estar viviendo todo esto desde ambas partes del trato (como blogger de viajes y como responsable de marketing de una empresa turística), y siempre animo a mis compañeros de trabajo a contactar con los bloggers. Ellos tampoco muerden, al contrario, casi siempre están contentos de recibir feedback y de que les propongan colaboraciones, ¿verdad? 🙂