Olot es la capital de La Garrotxa, una zona tranquila, tradicional y de gran riqueza natural. Son pocos los turistas que llegan a adentrarse en la Provincia de Girona -suelen quedarse en Figueres y en la Costa Brava. Pero lo cierto es que en la Garrotxa se encuentran unos de los paisajes más bellos y únicos de Cataluña.
Mi madre nació y creció en Olot, por lo que yo siempre he tenido una especial devoción por esa zona, aunque reconozco que Barcelona me ha convertido en una urbanita total. Sin embargo, la cultura de los paseos en la montaña, los bosques frondosos y los colores del otoño consiguieron que una parte dentro de mí necesite escaparse a menudo lejos de la ciudad. (Nota actualizada al lector: desde febrero 2015, ¡vivo en Olot! Su naturaleza y tranquilidad me convencieron para dejar la gran ciudad).
Visitas y excursiones esenciales en la Garrotxa
Si es la primera vez que visitas la zona de Olot y la Garrotxa, éstas son las visitas que no debes perderte. Si deseas profundizar más o ver cosas distintas, echa un vistazo a este otro artículo sobre Olot.
Pueblo de Besalú
Un pueblo medieval precioso, con un importante barrio judío. Su imagen más conocida es el puente de piedra que atraviesa el río Fluvià. ¡La imagen de postal perfecta! Deberás dejar el coche fuera del pueblo, en parkings habilitados y bien señalizados, y pasear a pie por sus plazas, calles porticadas y senderos adoquinados. Consulta su agenda cultural; en Besalú suelen ser muy activos en exposiciones, mercados artesanales, fiestas populares… El último fin de semana de agosto suele hacerse la Feria Medieval de Besalú.
Vía verde del Carrilet de Olot
Si os gusta moveros y hace buen día, podéis alquilar un par de bicis y recorrer tranquilamente el bici carril de Olot hasta Les Preses (unos 5 km) o un poco más lejos incluso. El bici carril va hasta Girona (57km) y era la antigua vía del tren. Hoy día, el tren («el Carrilet») ya no funciona y el sendero se ha convertido en una magnífica vía verde que atraviesa la Vall d’en Bas, con sus pueblos encantadores como Hostalets d’en Bas, sus campos de trigo y sus masías auténticas. Más info de la ruta en bici Olot – Girona.
Parque Volcánico de la Garrotxa
Formado por una cuarentena de volcanes (algunos inactivos y otros dormidos) y una veintena de coladas de lava, es un paisaje espectacular y único en la Península Ibérica. El destino ideal para los amantes de las excursiones, el senderismo y la geología. Hay casi treinta senderos señalizados para recorrer el Parque, aunque lo más habitual es ir de un punto a otro en coche, visitando los tres lugares más emblemáticos:
- La Fageda d’en Jordà. Una «fageda», en catalán, es un hayedo. Éste es particularmente extenso y muy bello en otoño cuando los árboles tienen varias tonalidades de ocres. Dispone de senderos de diferente dificultad y longitud para disfrutar del paisaje. El coche puede dejarse en el parking de La Fageda, de forma gratuita. En el punto de información os darán un mapa de todo el Parque Natural y os informarán sobre las distintas excursiones a pie y en carro de caballos que pueden hacerse.
- Volcán Croscat. Mi volcán favorito por la espectacularidad de sus laderas. Ideal para poder ver las distintas capas del volcán y ver diferentes piedras volcánicas. Para llegar a él, podéis dejar el coche aparcado en el Parking del Volcán Santa Maragarida y andar unos 30 min hasta las laderas (fácil, aunque hay alguna subida).
- Volcán Santa Margarida. A pesar de que parezca una simple montaña por fuera, al llegar a lo alto del volcán veréis su enorme cráter y la iglesia justo en medio.
Pueblo de Santa Pau
Posiblemente uno de los mayores tesoros de la Garrotxa. Esta pequeña población se ha ganado a pulso ser uno de los pueblos más bellos de la zona. Su localización entre volcanes, su encanto medieval y su gastronomía hacen que Santa Pau sea un «must» para los que buscan tranquilidad en un entorno naturalmente bello. En Santa Pau debéis probar sus típico «fesols» (judías blancas) con butifarra catalana. En invierno, el pueblo se convierte en un pesebre viviente espectacular y todos los habitantes participan en la función.
Alojamiento con encanto en la Garrotxa
Hotel Cal Sastre Cal Sastre es un hotel con encanto en Santa Pau, situado detrás de la Muralla del Casco Antiguo, dentro del mismo pueblo. Este es uno de los hoteles con encanto que forman parte de Petits Grans Hotels de Catalunya. Además, cuentan con un restaurante muy conocido especializado en gastronomía volcánica, ubicado justo en la plaza principal de Santa Pau (el restaurante se llama Cal Sastre, también). El Hotel Cal Sastre es una antigua masía catalana, totalmente reformada, en el que todas las habitaciones y salas tienen una decoración antigua y única, que te evoca al pasado sin olvidar el confort de un tres estrellas con encanto. Lo mejor: su jardín soleado en el que puedes tomar el desayuno si el tiempo acompaña.
Mas Can Batlle Mas Can Batlle es una masía rural con encanto situada a las afueras de Santa Pau. Se encuentra a 10 minutos del pueblo (dirección Mieres), bosque adentro, en una zona aislada y muy tranquila, donde incluso hay una pequeña cascada. Cada habitación ha sido decorada de forma singular, con muebles antiguos restaurados y aprovechando la distribución y las piezas de la masía. Así, una de las habitaciones dispone de una bañera antigua con vistas espectaculares, y en otra se ha aprovechado el horno de la cocina para construir una magnífica chimenea.