Esta entrada también está disponible en: Catalán
Vale, me habéis pillado, es una historia inventada pero lo que no me invento son todas las cosas chulísimas y curiosísimas que hay cerca de Berga. ¡Ojo! Dinosaurios, minas de carbón, trenes de cemento, cuevas naturales llenas de oro negro, santuarios con vistas alucinantes y sí, también, el centro mundial del burro autóctono catalán.
Hace poco estuvimos de glamping en Berga. ¿Glamping? Sí, ese concepto estupendo que representa «ir de camping con glamour» – es decir, con todas las comodidades de un hotel, pero en medio de la naturaleza. Y si os soy sincera, debo reconocer que antes de nuestra experiencia, creía que no había muchas cosas a hacer por allí aparte de La Patum. Y me equivocaba por completo. ¡No exagero si digo que Berga (y el Berguedà) es un destino genial para un fin de semana en familia!
Elegimos Berga sobre todo por el alojamiento. Buscábamos un alojamiento familiar en el que pudiéramos hacer cosas con nuestra hija en caso de frío o lluvia. Y que estuviera cerca de La Cerdanya para poder encadenar los otros dos días de puente con la familia.
Fue solo una vez allí, casi por sorpresa, que descubrimos una gran cantidad de cosas a hacer con niños en los alrededores de Berga. Por eso, el Berguedà ya está en nuestra lista de destinos favoritos para ir con niños.
Cosas a hacer cerca de Berga…
Puente Romano de Sant Quirze de Pedret
Un puente romano precioso, bien conservado y desde el que salen algunas excursiones a pie. Merece mucho la pena que os acerquéis a Sant Quirze de Pedret, que está a 5 minutos en coche de Berga. Llegáis en coche hasta el mismo puente, donde hay un aparcamiento libre grande. Una vez cruzado el puente, tenéis la opción de subir al santuario de Sant Quirze (por la rampa o por las piedras).
Santurario de Queralt
Una visita a Berga no está completa sin pasar por el Santuario de Queralt, desde el cual tendréis una vista panorámica de Berga, del Cadí, de Montserrat y del Montseny. ¡Sí, prácticamente de toda la Catalunya central! Son 15 minutos en coche subiendo una carretera con algunas curvas, pero merece la pena.
Fuives: El Centro Mundial de Burros Catalanes Autóctonos
A 10 minutos en coche de Berga se encuentra la granja de Fuives, el centro mundial del burro catalán. A los que no sois de Cataluña quizás os sorprenda (e incluso os haga gracia;)), pero el burro catalán es un animal muy querido por los catalanes y muy «nuestro». El burro catalán es oscuro con el morro blanco. En esta granja crían burros autóctonos para conservar la especia desde hace 40 años y realizan visitas de 11h a 13h, por 5€.
Minas de Cercs y Huellas de Dinosaurios
El museo de las Minas de Cercs y Fumanya está a 10 minutos en coche y os permitirá entrar en una mina y explorarla por dentro. Entraréis unos 800 metros en tren minero y saldréis de ella caminando tranquilamente. Podréis visitar también el museo minero para saber cómo funcionaba la mina y como bonus final veréis huellas de Dinosaurio. Fumanya es una antigua explotación de carbón al aire libre donde se ha descubierto un espectacular yacimiento con miles de huellas, huesos y huevos de dinosaurio.
Algo más lejos… A una hora de Berga…
Jardines Artigas en La Pobla de Lillet y Tren del Cemento
Los Jardines Artigas son obra de Antoni Gaudí, cuando los construyó al Sr. Artigas como agradecimiento por haberle alojado en su casa en la Pobla de Lillet. Como podéis imaginar, son jardines preciosos, en los que naturaleza y arquitectura se fusionan a la perfección. Precio entrada a los jardines: 4,15€.
Justamente en los Jardines Artigas tenéis una de las paradas del antiguo tren del cemento que hoy día realiza un circuito turístico. Esta línea de ferrocarril unía la antigua fábrica de cemento Asland de Castellar de n’Hug con Guardiola de Berguedà, desde done partía la línea del ferrocarril hacia Berga y Manresa. A bordo del tren del cemento descubriréis el paisaje del Berguedà. Además de los Jardines Artigas, el tren también tiene parada en La Pobla de Lillet, La Pobla Centro y el Museo del Cemento-Castellar de n’Hug. El trayecto dura unos 20 min.
Fuentes del Llobregat y Pueblo Medieval de Castellar de n’Hug
El río Llobregat es uno de los más importantes de Cataluña y nace en las montañas del Berguedà. Más concretamente en el pueblo de Castellar de n’Hug. Una excursión fácil y preciosa y muy recomendable si vais con niños. Para mí, una de las excursiones más míticas y esenciales de Catalunya. Dejáis el coche en el Hostal Les Fonts y andáis los 800 metros hasta las fuentes o bien subís en coche hasta el aparcamiento Les Fonts (600m bosque adentro, una vez pasado el hostal).
El recorrido por las Fuentes del Llobregat está muy bien señalizado y preparado, con unas vallas de madera; hay varios escalones pero no son complicados. ¡En época de lluvias o deshielo, los saltos de agua son bastante impresionantes! La entrada es libre.
Tras la visita a la Fonts del Llobregat, muy recomendable que deis un paseo por el pueblo medieval de Castellar de N’Hug, a sólo 3km de las fuentes. Situado en la cima de la montaña, tendréis una vista fenomenal a la montaña del Pedraforca.
Si os entra hambre, os encantará saber que en Castellar de n’Hug son especialistas en hacer croissants gigantes y buenísimo. Si es la hora de comer, os recomiendo el restaurante Hostal La Neu, que cuenta con menú casero riquísimo, sirven rápido y tendréis buenas vistas al paisaje de los alrededores.
Mina de Petróleo de Riutort
La visita a la Mina de Petróleo de Riutort se realiza a lo largo de las galerías de la mina que, en realidad, se parece más a una cueva natural – con la singular particularidad que esconde piedras impregnadas de oro negro. Durante la explicación de la visita conoceréis mejor las características del petróleo, desde su formación, extracción y utilización, pasando por sus posibilidades, problemas e incertidumbres. La Mina de Riutort está muy cerca de La Pobla de Lillet y la entrada cuesta 4,50€.
Dónde Dormir en Berga
Nos alojamos en el Berga Resort y lo volveríamos a hacer con los ojos cerrados. No solo estuvimos de fábula en el chalet nº7 sino que además encontramos un trato muy agradable y atento.
Una mención especial para el empleado de recepción que nos convenció de subir al Santuario de Queralt a las 17h, simplemente contándonos su propia experiencia de esa mañana y mostrándonos fotos con su iPhone. Con gente local tan apasionada por su tierra es fácil convencer a los foráneos 🙂
El Berga Resort es un camping con todas las comodidades de un resort. Una pequeña «ciudad» dedicada al ocio y al descanso familiar. Nosotros nos decidimos al ver la cantidad de cosas que ofrecía — sería un plan perfecto en caso de lluvia o frío. Atentos:
- dos piscinas climatizadas cubiertas (una para nadar, otra para jugar),
- un chiquipark enorme y cubierto («saltypark» lo llaman ellos), para niños a partir de 1 año,
- un parque infantil con tirolina y varios toboganes y castillos de distintas dificultades,
- talleres y actividades para niños con animador,
- spa con circuito de aguas,
- pistas de tennis y pádel,
- y para verano: piscinas al aire libre que incluyen zona para peques y tobogán acuático (!!!)
Aunque si le preguntaseis a nuestra hija qué es lo que más le gustó, estoy convencida de que diría: la buhardilla abierta del chalet en el que dormíamos. Los chalets son como bungalows de madera pero más grandes. Tienen dos habitaciones abajo y una tercera en un altillo que nosotros usamos como «sala de juego» y «lugar mágico». Nuestra hija se pasó los dos días ensayando cómo subir y bajar por la escalera, y jugando largos ratos cada tarde-noche en la buhardilla.
El Berga Resort cuenta con bungalows, mobil-homes y chalets, además de espacio para tiendas de campaña y rulots. Muy recomendable reservar un chalet si sois una familia con niños, ya que dispondréis de mucho espacio y estaréis cómodos. Todo es de madera, muy acogedor y cálido. La temperatura, perfecta y las camas comodísimas. Y yo repito: ¡así sí que se puede ir de camping!