Compañías como Turkish Airlines se han dado cuenta de esta tendencia cada vez mayor y han querido cubrir la necesidad ofreciendo el bus turístico gratis a todos sus pasajeros que se encuentran en Estambul en tránsito, y tienen varias horas de espera hasta su próximo vuelo. Una oportunidad genial para pasar un día en Estambul visitando lo más esencial de ciudad y descansando entre vuelo y vuelo. ¿No os parece una gran idea? Si os interesa la propuesta, en la web de Turkish Airlines os cuentan más.
Visitas esenciales en Estambul
Para aquellos viajeros que quieren visitar lo más esencial de Estambul en un día, aquí va una guía práctica para que la visita sea lo más provechosa posible. Tened en cuenta que estos son precisamente los sitios más turísticos, por lo que es posible que hayan largas colas de turistas. Sin embargo, todos se encuentran en la misma (barrio de Sultanahmet) y lo mejor es ir andando de un sitio al otro, por lo que resulta un buen recorrido para descubrir también las callejuelas de Istanbul.
- Santa Sofia (Aya Sofia)
- Mezquita Azul (Sultanahmet)
- El Palacio de Topkapi y comida en Konyali Restaurant dentro de Topkapi
- Bazar de las especies
- Gran Bazar
- Vistas de la Torre y Puente de Galata desde el puerto de Eminonü
Entre la dificultad del idioma para los hispanohablantes y las pocas señalizaciones en las calles de la ciudad, es habitual perderse o desorientarse andando por las calles cercanas al Gran Bazar. He recopilado el recorrido en un mapa interactivo de Google Maps para que podáis visualizar el recorrido.
SANTA SOFIA (AYA SOFYA)
No hay mejor manera de entrar en la historia multi-cultural de la antigua Constantinopla que visitando Santa Sofía. Primero fue una iglesia (siglo VI), luego una mezquita (siglo XV) y hoy en día es un museo. El paso de las culturas se hace muy visible en su interior, llena de iconos musulmanes y cristianos mezclados en una obra única. Al ser un museo, las mujeres pueden entrar sin taparse la cabeza. La entrada cuesta alrededor de 25TL. Suele haber cola para entrar así que intentad ir a primera hora.
MEZQUITA AZUL (SULTANAHMET)
La Mezquita Azul es, posiblemente, la representación más clara de lo que vemos al imaginar Estambul. Arte otomano en estado puro. Esta particular mezquita impresiona a los turistas occidentales por el color azul de los azulejos en el interior, y por su actividad como lugar de culto religioso. Es una visita obligada por su impresionante diseño interior, pero armaos de paciencia ya que está muy masificada. Suele haber mucha cola pero su visita es gratuita así que conseguiréis entrar enseguida. Al ser una mezquita activa, las mujeres debemos entrar cubriéndonos la cabeza con un pañuelo y sin ropa provocativa (nada de escotes ni de mini-faldas), por respeto a la religión musulmana. Además, se debe entrar descalzo. Para ello, os darán bolsas de plástico en la entrada para guardar los zapatos. ¿Y qué provocan centenares de pies descalzos en una moqueta, tras haber andado por las calles de Estambul? Olor de pies, correcto. En mi última visita a Estambul descubrí que en realidad este olor lo provocamos en gran parte los turistas que entramos con los pies sudados. Los musulmanes que entran a rezar tienen un espacio donde pueden lavarse los pies antes de entrar.
Si os interesa conocer la historia y religión musulmana, otras mezquitas céntricas no tan conocidas permiten la visita y ofrecen una versión más auténtica y real de su función como lugar de culto (probad en Yeni Camii, Mezquita Nueva, en el Puerto de Eminonu).
Palacio de Topkapi
Topkapi era el centro administrativo del Imperio Otomano y hoy en día es un extenso museo formado por diferentes palacios y jardines que consiguen que el visitante vaya descubriendo paso a paso la historia musulmana y las reliquias del imperio. Visitar todas las estancias de Topkapi llevaría un día entero así que si tienes pocas horas lo mejor es visitar las más importantes e impregnarte de arte otomano paseando tranquilamente por los alrededores de los palacios. La estancia de las Reliquias Sagradas y el Palacio de Bagdad son dos de las que merece la pena. En la primera, verás reliquias del Profeta, que son hoy los símbolos sagrados de la religión musulmana; y en el segundo, tendrás unas vistas impresionantes de la Torre de Galata.
Tras tanta visita, seguro que te entra el hambre. Una muy buena opción es comer en Topkapi mismo. El Konyali Restaurant and Cafe se encuentra en el recinto de Topkapi y tiene una fabulosa terraza con toldo orientada al mar, donde descansarás y tendrás unas vistas espectaculares al mar del Bósforo. Los precios son asequibles y sus platos son comida típica otomana: cordero, kebab, ensalada, verduras al vapor… ¡Todo delicioso! Y si puedes reservar, todavía mejor.
Gran Bazar
Para bajar la comida, nada mejor que un paseo suave (y en bajada) hacia el Gran Bazar. El «parque de atracciones» por excelencia de Estambul en el que los turistas y los comerciantes juegan al juego del regateo. Calma, paciencia y a disfrutar del espectáculo! 🙂 Alfombras, teteras, lámparas, zapatillas turcas.. Es difícil salir del Bazar sin comprar. Las tentaciones son grandes y los comerciantes las hacen mayores. Lo mejor es dejarse llevar por las callejuelas laberínticas. La entrada es gratuita.
Bazar de las especies
Y unas calles más abajo, hacia el puerto, está otro bazar, el de las Especies. Como su nombre indica, la mayoría de los tenderetes venden especies turcas para aliñar los platos. Si buscas souvenirs, entre un bazar y otro deberías encontrarlos todos! El bazar de las especies es más pequeño y consta de una calle pero resulta curioso visitar. Su entrada también es gratuita.
Puerto de EMinonu y Puente de Galata
En el Puerto de Eminonü encontrarás el puente de Galata que va hacia el barrio que lleva el mismo nombre. Este punto es atractivo por ser una bonita «postal» en la que se dibujan pescadores, tenderetes de sardinas, ferrys navegando por el Cuerno de Oro y la mezquita Nueva (Yeni Camii). La imagen ideal para despedirse de Istanbul y continuar nuestro viaje.
SI TE SOBRA ALGO DE TIEMPO…
- Relájate en un hammam turco y dale unos mimos a tu piel.
Son numerosos los baños turcos que podrás ver y visitar en Estambul. Unos más auténticos que otros, pero la mayoría están enfocados al turismo y ofrecen sesiones que van entre los 30 y 70 TL. Hoy en día, pocos turcos acuden al hammam a asearse para seguir una tradición centenaria. Sin embargo, se ha convertido en una experiencia tradicional bien curiosa y recomendable para el turista que llega a Estambul. Ten en cuenta que una sesión suele durar 2h (!) pero al salir, sentirás la sensación de relax y de piel cuidada perfectos para continuar la visita. Por tradición, los hammams suelen tener estancias separadas para hombres y mujeres, aunque también los hay mixtos. Tras haber probado ambas experiencias, recomiendo la tradicional (separada). Los históricos Hammami Cagaloglu se encuentran cerca de Topkapi y fue incluido en el Best-Seller «1.000 places to see before you die» del The New York Times. Su interior es espectacular y las sesiones de Lux os dejarán la piel limpia y fina como un bebé. No tiene pérdida la experiencia de que las mujeres del Hammam te laven y te enjabonen de arriba a abajo – no os lo perdáis!
- Disfruta de una cerveza turca «Efes» en un bar.
- Toma un té turco (té chai).
- Prueba los fistik baklaba
Típicos pastelitos de pistacho (fistik en turco). Muy dulces y un tanto empalagosos, pero típicos y deliciosos. El perfecto souvenir para un cuñado goloso o unas amigas con quien has quedado para merendar.
Seguro que tras esta corta pero intensa visita, Estambul no te habrá dejado indiferente. Nunca lo hace. El choque de culturas, la religión musulmana y el caos permanente en el que vive la ciudad consiguen hacer de Estambul una ciudad única en el mundo. Tan cercana en cuanto a gastronomía y carácter, y tan lejana en tradición y cultura. Bienvenidos a esa gran metrópolis de contradicciones armónicas llamada Estambul.